“¿Una política de la resistencia o una práctica de la diferencia?”
El Congreso tuvo lugar entre el 27 y el 29 de septiembre, en la Facultad de Psicología de Rosario, Santa Fe
El nuevo II Congreso Internacional de Psicoanálisis fue encarado desde una perspectiva de cierta inquietud renovadora, asegurada por presencias como la de Juan Carlos Volnovich.
Merece destacarse la participación de muchos colegas miembros de nuestro grupo: Adriana Franco, Gisela Grosso, Susana Lado, Graciela Manrique, Daniela Muiña y nosotros mismos, en una mesa que compartimos otra vez con Jaime Fernández Miranda, cuya ponencia sobre nuevos ángulos de trabajo en el tratamiento de niños sonó entusiasta y transformadora.
Era inevitable, dadas las informaciones que nos bombardean diariamente desde aquí y desde los más diversos lugares del mundo, que la problemática del abuso sexual tuviera cierta preeminencia; y a ella se dedicó específicamente la ponencia de Marisa Punta Rodulfo.
(2do Congreso Internacional de Psicoanalisis de Rosario. Rodulfos equipo docente)
En cuando a la mía personal, la encaré desde la perspectiva de un doble comienzo del psicoanálisis como disciplina, centrado el primero en la importancia del trauma y del trauma sexual en particular, bajo el nombre que Freud le da de seducción. Pero este comienzo fue demasiado rápidamente reemplazado por una cierta abjuración que lleva a Freud a descreer de los relatos de pacientes que testimonian de abuso temprano, y a veces muy prolongado, y a considerar tales relatos como una ficción fantasmática a la que le da el estatuto de realidad psíquica pero no de realidad material. Tal retroceso indujo a que el psicoanálisis durante muchos años perdiera casi todo contacto con lo traumático y los reimplantara en términos de fantasía. La oleada actual y ya no tan actual de diversos testimonios de abuso y de violencia, tanto en el seno de las familias como en el de las más diversas instituciones, viene a refutar, retornando como real, aquella concepción que además absolvía al adulto al situar el deseo incestuoso en el corazón del niño y no como manifestación grupal plagada de complicidades.
(2do Congreso Internacional de Psicoanalisis de Rosario. Marisa Punta Rodulfo, Ricardo Rodulfo y ponentes)
Nos pareció importante, dado lo multitudinario de la concurrencia y de la predominancia de colegas jóvenes, que esta perspectiva pareciera haber tenido su impacto, sobre todo pensando que en los círculos oficiales del psicoanálisis siempre se defendió ese giro de Freud como si se tratara de un gran proceso teórico. Asimismo, nos pareció alentador detectar cierta fatiga en ese público joven respecto al uso reiterativo y estereotipado de vocabularios teóricos que evocan lo que Winnicott llamaba “lenguaje muerto”, acompañado de una predisposición bastante explícita para escuchar ideas y formulaciones renovadas e incluso considerablemente alejadas de algunas concepciones psicoanalíticas demasiado establecidas y por lo tanto demasiado estáticas.
(2do Congreso Internacional de Psicoanalisis de Rosario. Susana Lado y ponentes)
En otro orden de cosas cabe revalorizar la participación activa de muchos colegas en los debates a que dio lugar el proyecto de despenalización del aborto, así como en otras manifestaciones públicas que suponen fuertes desacuerdos con la política social y económica emprendida estos últimos años. Más allá de respeto por la heterogeneidad inevitable de opiniones y de posiciones lo que nos parece más valorizable es el hecho de no aislar el trabajo del psicoanalista de los contextos buenos o malos en que este trabajo se despliega, so pretexto del viejo motivo de la “neutralidad”, y cuidando al mismo tiempo de no caer en expedientes ideológicos que implicasen tentativas de adoctrinamiento del paciente.